La electroestimulación muscular o estimulación neuromuscular eléctrica es una forma de ejercicio usando impulsos eléctricos.
Estos impulsos se generan con un dispositivo con electrodos que se aplica en la piel cerca de los músculos que se quieren estimular.
Entre sus beneficios se encuentran:
Elimina las sustancias tóxicas del cuerpo.
Favorece la circulación sanguínea, así como del riego linfático.
Ayuda en la recuperación tras un esfuerzo físico.
Una mayor activación muscular y contracción de las fibras.